La vida se pasa con variaciones de los cambios de ánimo: hay días que no se sabe muy bien porqué, todo es maravilloso, hay otros en los que todo es oscuro y negro, pero hay momentos, que se quedan grabados como imágenes en la retina, esos momentos, son los momentos "de calidad".
Los momentos de calidad son los que nos hacen felices, la felicidad es un tema del que hablaré en una entrada exclusiva ya que no tiene desperdicio, es algo que todos ansiamos, pero que ni siquiera somos capaces de describir.
Uno sabe que tiene un momento de calidad, en el mismo instante en el que empieza a disfrutarlo, se pueden provocar, pero normalmente surgen cuando menos te lo esperas.
Hay que tener momentos de calidad, si no tiene sus momentos de calidad búsquelos o de lo contrario, la vida se le pasará monótona y aburrida.
No es fácil conseguirlos, duran poco, pero sirven para sentirse vivo, alegre de existir e ilusionado, en un momento, todo cobra sentido y el camino duro hasta llegar a ese punto parece, entonces, mucho menos arduo que antes.
Esos momentos están en los viajes, en las películas, en las experiencias, con los amigos, con la pareja, en la moto, en el coche, en la noche, en el día, en la lluvia, en el sol... y como el polvo, en el viento...
1 comentarios:
Probablemente esos momentos de calidad son aquello que se suele llamar "la chispa de la vida", para mi son instantes que quedan en nuestra memoria y que al evocarlos se nos dibuja una sonrisa y sentimos una oleada de satisfacción, y entonces nos damos cuenta de que si la felicidad existe se debe parecer bastante a lo sentido en aquel momento. Por eso todos deberíamos dedicar parte de nuestra energía a conseguirlos y a conseguírselos a las personas que queremos, porque aunque a veces parece que lograr un momento de calidad es tan difícil como bajar la luna, otras veces resulta tan sencillo como una simple caricia.
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